Gijón: ¿De Muro-coche a Muro-parque?

Reducir al máximo el tráfico a motor eliminando la actual barrera de coches se presenta como una interesante opción de futuro


El Muro de Gijón es uno de los espacios urbanos más singulares del Cantábrico. A lo largo del siglo XX la ciudad creció hacia el este hasta alcanzar el río Piles. Para urbanizar la playa de San Lorenzo, en 1915 crearon El Muro, que nació como un plácido bulevar y hoy se pregunta cómo será su mañana.

El desarrollismo implicó la construcción de grandes volúmenes en primera linea de playa. Hoy conforman el skyline de la ciudad asturiana de casi 300.000 habitantes que, pese a no ser miembro de la Red, nos invitó, a través del Colegio de Arquitectos de Asturias, a participar en una webinar con tres primeros espadas de la planificación urbana más avanzada: Alfonso Sanz, Salvador Rueda y Zaida Muxi. Ana Montalbán, directora técnica de la Red de Ciudades que Caminan, presentó la ponencia “El muro que te hace única”.

Una documentada y cuidada presentación del miembro del Colegio Manuel García, contextualizando el objeto de la jornada y presentando a cada ponente dio lugar a cuatro conferencias que coincidieron en que convertir el actual Muro en una especie de parque entre el de Isabel la Católica y Cimavilla —los dos extremos del arco marítimo este de la ciudad— sería la mejor opción que debería adoptar el Ayuntamiento.

Plan Clima de Donostia

Cada ponente lo argumentó desde una óptica distinta. Alfonso Sanz aportó la experiencia del Plan Clima de San Sebastián. Allí se plantea reducir el 40% de los gases de efecto invernadero para el 2050 promocionando el desplazamiento activo, ya que la movilidad es la principal fuente de contaminación. La solución consiste en cambiar el modelo de movilidad por otro con mayor protagonismo del peatón, las bicis y el transporte público.

Supermanzanas de Vitoria-Gasteiz

Salvador Rueda habló de las 70 supermanzanas que la ciudad de Vitoria-Gasteiz planeo para su implementación en los próximos años, rescatando para otras actividades el espacio de numerosas calles hoy ocupadas por los coches, eliminando los tráficos de paso. “El espacio público es la casa de todos” es una de las ideas fuerza que expuso antes de enseñar una de las gráficas que protagonizaron la jornada: el plano de la ciudad con la franja costera de color verde, enlazando los parques de Isabel la Católica y Cimavilla, situados en los extremos del Muro.

«Si tardan, se arrepentirán»

Rueda invitó a la ciudad a imaginar su Muro lleno “no de peatones, porque los peatones ya no existen. Hoy tenemos que hablar de ciudadanos que utilizan el espacio público para cientos de cosas”. Terminó su alocución expresando un convencimiento: “El Muro se recuperará, tarde o temprano. Si tardáis mucho en hacerlo, os arrepentiréis de no haberlo hecho antes”.

¿Quién usa el espacio?

Zaida Muxi habló sobre todo de las consecuencias que tienen las decisiones urbanísticas sobre la vida cotidiana de las personas, especialmente de las mujeres y las personas más vulnerables, como las mayores o la infancia. El significativo título del ensayo de Katrine Marçal, “¿Quién le hacía la cena a Adan Smith?”, le sirvió para enfocar el tema del Muro desde el punto de vista de la usabilidad del espacio por la mayoría de la población, ya que el uso del coche en la movilidad es mayoritariamente masculino y al coche está consagrada la mayor parte de esta superficie urbana.

La ciudad, un ecosistema

Repasó numerosos ejemplos de animación de espacios urbanos gracias a su rediseño, una vez liberados de la excesiva presencia de coches. Uno de los más interesantes fue la promoción de espacios para el juego en Santa Coloma de Gramenet, una de las Ciudades que Caminan, limítrofe con Barcelona, que recuperó espacios públicos que previamente no resultaban atractivos para la gente. También puso ejemplos de la capital catalana, y animó a Gijón a que concibiese ese espacio urbano con un enfoque territorial “ecosistémico”, en el que las personas recuperen su protagonismo, con toda la diversidad y las posibilidades que ello implica, si consiguen acabar con la barrera que hoy separa los edificios de la playa.

Un parque urbano de playa

Reducir el tráfico de coches al necesario fue la opción apuntada por Ana Montalbán, que desde la Red de Ciudades que Caminan difunde las ideas regeneracionistas sobre el espacio público recogidas en los objetivos de la entidad. “El Muro debería ser un parque urbano de playa, en vez de una carretera que se interpone entre los edificios y el mar” Anunció que la Red no tiene nada contra los coches, pero sí contra su abuso en el medio urbano, donde hay que recuperar espacio para las personas a costa del exceso que hoy se dedica al coche. La alternativa es caminar, la bici y el transporte público, especialmente en una ciudad llana, compacta y con un acabado urbano de calidad como es Gijón, la ciudad más poblada de Asturias.

Menos coches, plataforma única

Tras explicar que la red viaria de la ciudad no necesita esa “circunvalación sobre el mar”, recomendó que el tráfico a motor fuese únicamente de acceso a garajes, abastecimiento comercial y transporte público. Un estatus que podría lograrse sin carriles convencionales y con una estructura de plataforma única para la convivencia entre la movilidad natural y la mínima motorizada, recuperando el resto del espacio para el ocio, el deporte o la economía terciaria, recuperando el concepto de Ágora y favoreciendo el dinamismo económico del zócalo urbano, hoy cegado por la presencia de automóviles.

Valentía política

Puso como ejemplos de regeneración urbana los de ciudades como Valencia, Sevilla, A Coruña, Barcelona, París y Nueva York, que han acometido distintos procesos de recuperación de espacios icónicos en los últimos años. En cuanto a la controversia actual relacionada con el Muro, animó a abandonar “ideas del pasado” como construir un túnel para coches o mantener el aparcamiento o el carácter de autopista urbana, y a afrontar la oposición política con valentía, ya que los temores empresariales se disipan cuando los negocios se recuperan tras las reformas.

Comisión del Muro

Precisamente la valentía política fue una de las ideas recogidas al finalizar la jornada por Bárbara García Ovies, presidenta de la comisión que dentro del Consejo Social de la ciudad está estudiando las ideas sobre el futuro del Muro. Entre ellas destacó la necesidad de fomentar la movilidad activa, recomendar una solución en plataforma única con velocidad máxima de 10 km/h, la idea del corredor verde, su transformación en ágora urbana, entre otras ideas que la Comisión elevará al Ayuntamiento de la ciudad para cooperar en la toma de tan importante decisión urbana. Esta comisión está formada por un representante de cada grupo municipal, y otros del Foro de la Movilidad, de asociaciones vecinales urbanas y rurales, de la sectorial de medio ambiente, sindicatos y patronal.

SUSCRÍBETE

Otras entradas interesantes

Share This