La Red de Ciudades que Caminan se rige por este decálogo de principios propios, así como por los derechos y principios estratégicos recogidos en la Carta de los Derechos del Peatón, adoptada por el Parlamento Europeo en octubre de 1988, y por la Carta Internacional del Caminar, diseñada por especialistas de todo el mundo en el marco de las conferencias internacionales Walk 21, en 2006.
La adhesión a la Red de Ciudades que Caminan supone asumir como propios los principios y derechos recogidos en estos tres documentos, según los cuales caminar debe ser el máximo exponente del sistema de la movilidad urbana por ser condición indispensable para posibilitar ciudades amables, saludables, sostenibles, equitativas, inclusivas y atractivas, con mayor cohesión social e igualdad de oportunidades en el uso y el disfrute del espacio público.

Versión ilustrada de la Carta de los Derechos del Peatón.
Elaborada por Liga Peatonal e ilustrada por Edgarseis.