Se abren distintas líneas de colaboración entre La Paeria y la Red
Las enormes posibilidades de Lleida para convertirse en una ciudad de amplia dimensión peatonal fueron estudiadas en una reciente reunión entre Cristina Morón, Regidora de Seguretat Ciutadana, Mobilitat i Civisme; Carlos Pérez Mauri, Director de Agenda Urbana y la directora técnica de la Red de Ciudades que Caminan, Ana Montalbán.
Esta primera toma de contacto entre la Red y la regidora, que se incorporó al cargo tras las elecciones de junio sirvió para analizar los beneficios de los que Lleida puede disfrutar por ser miembro de la Red, entre ellos del Metrominuto, una campaña propia de Ciudades que Caminan que puede contribuir a integrar el relato peatonal en las políticas de recuperación del espacio público.
También se valoraron las posibilidades de jugar un papel activo en parte su estrategia de gobernanza, cooperando en las iniciativas sobre movilidad y espacio público que el ayuntamiento pudiese implementar en el futuro.
ZBE
La ciudad se encuentra en la fase final de la redacción de su PMUS, justo antes de su aprobación. Y están estudiando la implantación de su ZBE. También se planean lograr la accesibilidad universal y promover la recuperación integral de su centro, como retos de futuro.
Algunos casos de referencia, como Pontevedra y Estepona, podrían servir de ejemplos paralelos sobre cómo el municipio puede ganar puntos en la recuperación del espacio público y su posicionamiento como ciudad amable, saludable y resiliente. Estas ciudades revirtieron algunas inercias heredadas, debido a la atracción nueva de población que comenzó a recuperar muchas viviendas abandonadas.
Las posibilidades que tiene Lleida para ser una ciudad caminable son muy positivas, pues es una ciudad muy compacta y densa, donde se puede ir caminando prácticamente a todas partes. En su rico centro histórico ya existe un extenso y continuo conjunto de calles peatonales por las que caminar es muy agradable. Con poco esfuerzo su futura Zona de Bajas Emisiones podría convertirse en una verdadera Zona de Bien Estar, articulando una red peatonal que abarque el conjunto de la ciudad.
