La RCqC y el Instituto de Cidades e Vilas com Mobilidade unen sus fuerzas para cooperar por un espacio urbano de mayor calidad en los dos países
Los responsables de la RCqC y el ICVM, Miguel Anxo Fernández Lores y Paula Ribeiro da Silva Teles, firmaron en Porto un acuerdo de cooperación entre ambas entidades que les permitirán intercambiar constantemente información y participar en eventos generados por las dos asociaciones que persiguen espacios urbanos con menos coches, más movilidad natural y más vida pública.
Hasta ahora, tres ciudades lusas formaban parte de Ciudades que Caminan: Torres Vedras, Loulé y Vilamoura, que continuarán figurando como miembros de la Red, así como la mexicana Orizaba. En total componen la Red en este momento 76 entidades públicas que representan a 9,3 millones de personas.
La firma se realizó el 9 de septiembre, en el marco del Congreso Cidades que Caminham, organizado por el ICVM, que sirvió también para la presentación de la Rede Ibérica de Cidades que Caminham, un acto al que asistió también el Secretario de Estado da Administração Local e Ordenamento do Território, Dr. Carlos Miguel y que había sido inaugurado por el Secretario de Estado da Mobilidade Urbana, Ing. Jorge Delgado.
Caminar, lo natural
La colaboración entre ambas redes parte de las ideas compartidas basadas en que el caminar es la forma más natural de moverse y por ello ha de ser crucial en la movilidad urbana. Ambas entidades buscan “el bienestar de la población a partir del incremento de la caminabilidad en las ciudades, buscando, de forma gradual y significativa, ampliar el número de personas que se desplazan a pie en el marco de sus actividades diarias”.
En cuanto a los objetivos específicos se consideran hacer realidad el pleno derecho a la ciudad para todas y todos, alterar significativamente la cultura dominante del uso del espacio público, dotar a los territorios de accesibilidad universal, incrementar los niveles de salud pública, combatir el calentamiento global, promover la movilidad suave y activa, incrementar los índices de interacción social de la ciudadanía, favorecer el urbanismo y la gobernanza de proximidad geográfica e institucional, además de dinamizar la existencia de corredores verdes y azules como infraestructuras esenciales para el caminar.
Se comprometen así mismo en organizar o cooperar en conferencias y congresos, formación, sensibilización, divulgación de acciones y otras cuestiones de interés mutuo, como la creación de un Premio Ibérico de las Ciudades que Caminan.
En el congreso Cidades que Caminham, además de las intervenciones transversales y de corte académico se presentaron casos de ciudades como Porto, Guarda, Viana do Castelo, Nazaré, Loulé, Vila Real, Braga o Évora, entre otras, algunos ejemplos de los avances en caminabilidad que impulsan las ciudades lusas.
Valentía para transformar
El presidente de la Red, Miguel Anxo Fernández Lores, habló sobre la transformación de Pontevedra, ciudad de la que es alcalde y que constituye un caso de éxito en sus objetivos de desautoxicación, tal como lo reconocen los numerosos premios que en los últimos años le otorgaron diversos organismos internacionales.
Por encima de todo, Lores indicó que la valentía es el principal ingrediente para impulsar los cambios urbanos: “Proponer antes de las elecciones y ejecutar una vez que consigues los primeros apoyos, pues una vez que está marcado el ritmo de la transformación, no se quiere volver atrás”.
Apoyo mutuo
El funcionamiento y las enormes posibilidades de servicio que la Red ofrece a las ciudades miembro fueron glosadas por su directora técnica, Ana Montalbán, quien animó a las personas presentes —mayoritariamente personal técnico y político de la administración local— a apoyarse mutuamente para conseguir la inspiración y las claves necesarias para promover reformas urbanas interesantes. Las diversas campañas divulgativas que se ofrecen para su utilización a lo largo del año, el Metrominuto o la necesaria formación del personal fueron puntos destacados por Montalbán como asuntos que más animan a las ciudades a pertenecer a esta red de autoapoyo.
La relación entre el ICVM y la RCqC se remonta a años atrás, materializándose en la participación de su responsable, Paula Teles, en diversos eventos de la Red. También tomará parte en el próximo Congreso de Palma, el noveno de la Red, los días 6 y 7 de octubre.
